CONVERSANDO EN DEBATE. RICARDO GARCÍA TREVIÑO.
Lic. Ricardo García Treviño
Hola, te saludo con el gusto de siempre. Horacio García, pertenece a esa generación de los inicio de los cuarenta del siglo pasado, cuando las carencias para desarrollarse superan fácilmente a lo necesario para salir adelante en los propósitos de vida.
HORACIO GARCÍA, se forjo en base en su carácter y temperamento propio, supo desde niño superar la adversidad y transformó su cuerpo; espíritu y alma en algo indomable ante los retos de la vida. Fue así como se graduó de dos carreras profesionales dentro de la UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE NUEVO LEÓN, como son la de Ingeniero Mecánico Electricista e Ingeniero Mecánico Administrados, maestrías y un sinfín de especializaciones en su carácter de diplomados, ha acumulado en su fructífera trayectoria. Formando parte de aquel glorioso cuerpo de Oficiales de Instrucción Militar denominado COLEGIO CIVIL, al lado de distinguidos hombres de bien como LEOPOLDO RUIZ LEAL, MAX RENDON, REYNLADO GUAJARDO TREVIÑO y otros tantos más.
HORACIO GARCÍA TREVIÑO, está casado con la SRA. ANGELICA GUERRA MOYA, feliz y paradigmático matrimonio, al lado de sus hijos HORACIO, EDGAR HOMERO Y SU HIJA ANGÉLICA, que a la vez, siguiendo el ejemplar ejemplo de sus progenitores, han formado ejemplares familias. … Era un verano de 1966, la tarde era calurosa, empezaba a caer el sol, el viejo.-Don José García Gallegos.-el buen viejo, el viejo de todas nuestras añoranzas, de pie junto a su mecedora de metal repintada de blanco y rojo, se refería a HORACIO, en platica con su hijo.
Mira hijo, te recuerdas que aquí en la casa recibía la visita casi a diario de VINICIO GARCÍA, el gran jugador de Beis bol, oriundo de Veracruz, que destacó en la liga mexicana, con los diablos Rojos del México y los sultanes Monterrey, así como en la liga del Pacífico con los Mochis y con Ciudad Obregón. También dejó su huella en Cuba y en el circuito texano y que decir su paso por las grandes ligas con los Orioles de Baltimore. Todo ello lo llevó al salón de la fama.
Contestando su hijo a Don José, para entonces este ya sentado en la mecedora recién pintada de rojo y blanco. Como no se le va a recordar, si todos aquí en el barrio, venían a verlo para que nos platicara su vida beisbolera y a usted para saludarlo.
PUES NO, NO VENÍA NADA MÁS A SALUDARME, quería a tu hermano HORACIO, para llevárselo a jugar beis bol a las ligas mayores, ya que tenía todo para triunfar.-su recta superaba fácilmente las 90 millas por hora.- y yo le dije que no.-un dejo de tristeza en el semblante del viejo.- que por favor no se lo dijera porque lo iba a inquietar.
Allí el viejo guardó silencio, como dudando de su decisión, pero muy a su usanza no pronunció palabra alguna. Hubo un silencio cuasi divino y dos miradas furtivamente se cruzaron, acompañaron un solemne silencioso silencio para guardar el secreto, para después hacerlas valer para cuando las palabras no sean alcanzadas por los venideros días del mañana.
HORACIO GARCIA, no solo brilló en el Beis Bol, sino también en el atletismo y fut bol soccer y que decir en el Fut bol Americano, con los Osos de Ingeniería Mecánica en el circuito de la liga intermedia y en la Categoría Mayor con los TIGRES DE LA UNIVERSIDAD DE NUEVO LEÓN, donde brilló por su alta capacidad atlética y facilidad para el difícil deporte de las tacleadas, dónde hacía ver fácil sus grandes atrapadas. EL MEJOR EN SU POSICIÓN DE ALA ABIERTA.
HORACIO GARC[IA, paso de gigante en los lugares dónde ha labrado el hermoso juego de la vida, dónde siempre ha sido gladiador de los momentos difíciles. Enhorabuena por la semblanza de un hombre de bien.
