DÍAS NEGROS DE UN PERIODISTA; CRONICA.

CONVERSANDO EN DEBATE

RICARDO GARCÍA TREVIÑO

Lic. Ricardo García Treviño

Hola, te saludo con el gusto de siempre. Querido lector, es altamente probable, que el leer el título de este ensayo editorial, haya pensado en María del Carmen Aristegui Flores, y su conflicto obrero patronal con MVS noticias. ¡NO! no es así, lo que estas por observar es algo más grave de lo sucedido a la Sra. Aristegui Flores, y se trata de lo siguiente. En días pasados, hace diez días exactos, el periodista de marras, bajo del segundo piso de su casa, a las cinco y diez minutos de la mañana, ya que su rutina de hacer ejercicio lo esperaba. Repentinamente escucho frente a su casa, a escaso seis metros, el ruido de una motocicleta, el cual le pareció raro, porqué el periódico lo llevan a las tres de la mañana y a Él ya se lo habían dejado; el HORIZONTE, y su buen servicio de entrega. Cuál sería su sorpresa que el motorista, al estacionarse frente a su domicilio, hablaba con una persona, que se encontraba arriba de un árbol, frente a su casa. El sonido de las palabras se escuchó con claridad, más no lo que decían. Rápidamente se fue a su recamara a proteger a su esposa y hacer lo necesario para alertar a la policía. Estos acudieron en un tiempo razonable y se dieron a la tarea de tratar de localizar al de la motocicleta.

espionaje

El día anterior a ese evento, el periodista de marras, le habían “notificado” un hecho horripilante, en contra de él y toda su familia, donde un agente de la Procuración de Justicia, está involucrado, dejando en claro que no es  la oficina del Procurador, muchísimo menos la oficina del Poder Ejecutivo Estatal. Se reserva la reseña de tal acontecimiento, por las repercusiones jurídicas de la causa.

Por último, el sábado a las seis, con cincuenta seis minutos, en el Restaurant Vips, de avenida Constitución, por la lateral y pasando Venustiano Carranza, aquí en Monterrey, una camioneta pick Up, lo acoso por un tramo determinado. La preocupación subió de tono, cuando vio a cien metros del lugar del incidente, a un vehículo estacionado de la policía Regia, que dicho sea de paso, aún tiene grandes lagunas de honestidad. El periodista de marras, tenía una cita a las siete de la mañana en dicho restaurante; el Vips. Compromiso que acordó telefónicamente, dónde la intervención telefónica se da por un hecho.

DÍAS NEGROS PARA UN PERIODISTA, QUE LO ÚNICO QUE DESEA Y PRETENDE.-DONDE QUIERA QUE ESTÉ.- ES LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN, PARA PODER EXPRESAR LIBREMENTE, LO QUE PIENSA DE LA REALIDAD MEXICANA Y EL MUNDO.

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