CONVERSANDO EN DEBATE
RICARDO GARCÍA TREVIÑO
Hola, te saludo con el gusto de siempre. El prestigio de la UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE NUEVO LEÓN, EN EL DEPORTE, ESTÁ FUERA DE DUDA, EL NOVENO CAMPEONATO NACIONAL.-UNIVERSIDADES PUBLICAS Y PRIVADAS.-GANADO EN FORMA CONSECUTIVA, RESUME SU SUPREMACÍA.
¿Qué les paso en el clásico del viernes pasado? Iban por la victoria, sin complejos de ninguna naturaleza, se sabían ganadores, el equipo lucía triunfador; serio, pero bullicioso.
Aquellos momentos antes del clásico, en el entrenamiento previo, para los TIGRES, era una ambiente de ritual; ceremonioso y de gladiador a gladiador. La mente y el espíritu del muchacho, sabedor del sacrificio que imponen las horas en los campos de entrenamiento, presente en pleno esplendor.
Lo dicho con antelación, en el parrafo anterior, es que como exjugador.-RICARDO GARCIA TREVIÑO.-de cinco años; cinco temporadas, cinco años vistiendo ese uniforme, me sentí orgulloso del talante y porte de todos y cada uno de sus jugadores. Se observaba en cada quien, la gallardía; en valores y esfuerzo, de ser un universitario de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
El marcador; diecinueve puntos, contra siete, no refleja lo que sucedió en el campo, sin olvidar que derrota es derrota; victoria es victoria, y sin ninguna animo de culpar a los árbitros; estos hicieron mal su trabajo, inclusive en algunas jugadas importantes, no exhibieron buena fe, afectaron el resultados, aun así los TIGRES, no se rindieron, lucharon hasta el último minuto, ante un rival, que quiso humillarlos, y no lo logró, y que cayó.-TIGRES.- pensando en el regreso; la revancha deportiva, porque en el deporte, como en la vida, siempre hay un regreso, y máximo cuando hay en el entorno del quehacer deportivo, un prestigio, como el de la UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE NUEVO LEÓN, que hay que custodiar; defender y proteger.
SER TIGRE; EN LAS BUENAS Y EN LA MALAS, SOLO SE APRENDE EN LOS EMPARILLADOS, cuando se tiene el honor de portar esa casaca, por cinco años consecutivos, lleno de gloria y satisfacciones.
Por último, al staff de cocheo de los TIGRES, la parsimonia y las formas, déjenla en los vestidores, al campo de juego, se llega a ganar, nada más a ganar… solo ganar, sin dejar de ser un verdadero TIGRES, IMPULSADO DE VALORES DE VIDA, ALENTANDO SIEMPRE LA FLAMA DE LA VERDAD; ESTO ULTIMO, DENTRO Y FUERA DE LAS DIAGONALES, LOS JUGADORES SIEMPRE SE LOS AGRADECERAN.