CANTO POÉTICO.
RICARDO GARCIA TREVIÑO.
El día que Dios, participó de tan importante decisión, cual escogieras como profesión ser ENFERMERA, no fue al azar, fuste seleccionado entre un muchas que pretendían ser, pero no se les dio, no porque los ángeles ARCÁNGELES Y ÁNGELES CUSTODIOS no querían.
¡No! No fue por eso, fue porque para ser ENFERMERA, se requiere una vocación especial; una vocación divina, para poder ejercer esa digna y celestial profesión, como cuidar un enfermo; una enferma. Un niño, una niña, una anciana, un anciano, curar sus heridas, darle de comer, consolarla, abrazarla cuando requiera un abrazo, tomar un pañuelo y enjuagar sus ojos llenos de llanto, y darle palabras de aliento que le lleguen al corazón.
Bendito Dios, cuando decidió embestir a las mujeres ENFERMERAS de tal quehacer, propio de un ANGEL DE LA GUARDA, en la persona de una ENFERMERA, ya que su labor, su divina labor, la lleva cabo a contracorriente, con vientos en contra, con la incomprensión de un entorno que poco sabe decir GRACIAS, envueltos en un egoísmo que afecta su salud.
ENFERMERAS, ANGELES DE LA GUARDA.
POSTA DATA; enhorabuena por el gobierno Federal, por el homenaje en la conferencia Matutina, de parte de la presidenta CLUDIA SHEINBAUM PARDO, quien el fuego maloliente, lo convierte en agua bendita…
Que difícil es para la inteligencia media, entender las decisiones de Estado, dentro de la CUARTA TRANSFORMACIÓN Y EL PROYECTO DE NACIÓN.