CANTICO POETICO.
RICARDO GARCIA TREVIÑO.
Jajajajaja pobre viejo, aún camina, sin dar lastima, aunque una pierna le pida permiso a la otra para andar y sus ojos, ya cansados de tanto leer y sus oídos escuchan la mitad del hablar de los demás, un día sin anhelar, anhelando, se asomó a su destino; destino brillante y halagador, una bella y joven mujer, que desde que lo vio, una extraña mirada le brindó, con unos ojos misteriosos, llenos de ternura y aires amorosos.
Jajajajaja pobre viejo, repentinamente sintió en sus adentros el titiritar de bellos y coloridos pájaros que solo vuelan en pareja, como presagiando el futuro por mas negros que este parezca, cual sonrió y sus adentros broto aquella luz de brillante resplandor que ningún ser humano puede rechazar, siquiera esquivar, el amor y sus visiones encendidas. Paradoja, bella paradoja de la vida.
Jajajajaja pobre viejo, aquella hermosa mujer, donde su mirada y talante, aún no había aprendido a mentir, ya que no sabía hacerlo, porque la mentira no se le dio, DIOS, la protegió del diablo y sus diabluras y no se le encubo dentro del debate del crepúsculo de inicio de vida, ella; lo joven mujer, es buena porque la Virgen María, abogó para que así fuera, cual en el don en dar y entregar pasión, al viejo le asistía la razón, cual la chispa del amor causó estragos, ambos fueron devorados por las ansias de seres enamorados…
Jajajajaja pobre viejo, está enamorado de un abismo que los separa, ella tiene 25 años y él, la carga son cerca a los ochenta años. Jajajaja pobre viejo, está enamorado, ese es su castigo por todos los males que causó en su vida, Jajajajaja pobre viejo vive enamorado, condenado a la máxima sentencia de un tribunal celestial, estar enamorado y separado por un profundo abismo que es su propia edad, sin poder alcanzar aquellas fogosas ansias de la juventud, que y no le pertenecen.