POEMA.
RICARDO GARCÍA TREVIÑO.
“DÍGALE QUE NO SE CANSE” CUANDO EL DIABLO ESCUCHÓ TALES PALABRAS, ENMUDECIÓ Y SE QUEDÓ SORDO, HABLABA EL SUCESOR DE PEDRO; EL PAPA, EL APÓSTOL MAYOR.
“DÍGALE QUE NO SE CANSE”.
EL DESTINATARIO ERA UN MORTAL QUE LLEVA EN SUS ESPALDAS EL PESO DE UNA REPÚBLICA, QUE EL DIABLO LA QUIERE DEVORAR; ATRAGANTAR, ZAMPAR.
“DÍGALE QUE NO SE CANSE”.
EL PORTADOR DEL MENSAJE, CUAL PALOMA MENSAJERA, DE DIVINO PLUMAJE, GUARDÓ SILENCIO, ESTREMECIÓ SU ALMA Y FORTALECIO EL ESPÍRITU.
“DÍGALE QUE NO SE CANSE”.
LOS ÁNGELES EN EL CIELO, COMO NIÑOS EN ALGARABÍA, CANTABAN Y BRINCABAN EN REGOCIJO, Y UNOS A OTROS SE DECÍAN, EL MENSAJE NO ES PARA EL SOLO, ES PARA TODO UN PUEBLO, QUE LA VIRGEN MADRE LO APAPACHO, EN EL CERRO DEL TEPEYAC.
“DIGANLES QUE NO SE CANSEN”.
QUE SON MUCHO LOS LLAMADO Y POCOS LOS ESCOGIDOS, CUAL EL HOMBRE DEL QUETZAL Y PLUMAJE DE MOCTEZUMA, ES UNO DE ELLOS.
“DÍGALE QUE NO SE CANSE”
Conferencia de Prensa 23 de Octubre 2020
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