LUZ Y FLAMA.
RICARDO GARCIA TREVIÑO.
Hola, te saludo con el gusto de siempre. El mote de REY DE LOS DEPORTES, el béisbol, se lo ganó a ley. Asistir, o verlo por televisión, oh escuchar la narrativa a un partido de beisbol, era placentero, era disfrutar de cada pichada; cada jugada y obviamente cada entrada de juego, el beisbol en el ampayer de home oh pentágono y el de sus compañeros de bases, simbolizaban los valores de la sociedad norte americana; el ampayer tras de jom, es la autoridad máxima del juego, se gozaba el beisbol por la honestidad de los hombres de negro.
¿Cuándo cambiar ese ideático escenario? ¿En qué momento los transformaron? ¿Qué pasó con tal orgullo estadounidense? ¿Dónde y cuándo se perdió la vergüenza? Ya tiene rato, bien puede escribirse, varias temporadas, que el resultado depende de los ampayer y ahora hasta de la cámara revisora de jugadas, ya que hasta da la impresión que estamos en presencia de algo intencional, como es quebrar los valores de un deporte insignia, como es el béisbol, para facilitar el manejo del sentimiento colectivo de la masa, de una masa pensante, a una masa molesta; enojada y deprimida ante lo inverosímil de una decisión mal “cantada”, donde el parpadeo de un niño, se convierte en un coraje, una lágrima y una frustración, luego transformada en una salida fácil, ante esa realidad, absurda y maltratante.
Como toda acción mal, hay un o varios perjudicados, y uno o varios beneficiarios, estos son los DODGER DE LOS ÁNGELES Y LO MEDIAS ROJAS DE BOSTON, y el perjudicado los YANKEES DE NEW YORK, así como los beisbolistas de todas las franelas, ya que nada satisfactorio es el jugo rudo, propiciado por tal ampayeo, con rectas cercanas a las cien millas por hora, a un distancia de dieciocho metros, con cuarenta cuatro centímetros, tiradas contra el bateador y este no puede evitar que lo golpeen, en una criminal acción de dañar intencionalmente, cual parece increíble, no es materia o jurisdicción del fuero penal, sino es la la organización de las grandes ligas y todas las demás que giran a su alrededor. DEBEN SER LLEVADOS A UN TRIBUNAL PARA JUZGAR SU INTENCIONALIDAD, O EN SU DEFECTO, LA BUENA FE DEL LANZAMIENTO HACIA EL HOME OH PENTÁGONO.
Recuérdate que la democracia es el pacífico despertar ciudadano, en voz de un pueblo pensante; inteligente y sabio.
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