LUZ Y FLAMA.
RICARDO GARCIA TREVIÑO.
Hola, te saludo con el gusto de siempre. PAPA FRANCISCO, en la morada cual te encuentras, con Tu ejemplo, tu amor al evangelio, tu amor a tu Iglesia, el amor a los pobres y a la justicia social, así como la lucha hasta el final de los tiempos contra quien quiere destruir a la humanidad, como es el diablo y sus secuaces.
PAPA FRANCISCO, hacen de Ti, el oportuno intercesor de estos tiempos, donde la emboscada de satanás, en la elección de tu sucesor, se topará con pared, ya que imperará la presencia del Espíritu Santo, en el Padre y el Hijo.
PAPA FRANCISCO, DESDE TU ÚLTIMA MORADA, TE QUEDAS EN EL CORAZÓN DEL MUNDO, CUAL EL IMPERIO DEL MAL NO MANDA, pobres de los hipócritas, que más les valdría no haber nacido.
Recuérdate que la democracia es el pacifico despertar ciudadano, en voz de un pueblo pensante; inteligente y sabio.
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