CÁNTICO POÉTICO.
RICARDO GARCÍA TREVIÑO.
Don José, se casó con doña María allá por el 35, del siglo pasado, fue una boda al estilo de los viejos tiempos, el vestido de novia, el traje del novio color oscuro, corbata única y zapatos nuevos, donde don José, era un hombre pobre y de jornada diaria, ya me imagino el esfuerzo que hizo para pagar los festejos de su matrimonio con doña María, mujer de clase media acomodada y don José, de la clase baja acomodada y digna, ya que si algo nos enseñó como valores supremos, fueron el valor de la honestidad; el “viejo”; como le decía la doña, era un hombre alto, piel morena y pelo chino, atleta de carrera de fondo y conocedor de nuestra historia y de la naturaleza humana, el cual nos honró con su amistad, donde él escogió como fecha para su cumpleaños el 19 de marzo; festejo de San José, no creo que la fecha ha sido elegida por el “viejo”, fue San José, el que le llamó y lo bautizó con ese hermoso nombre, el cual unos de sus hijos lo llevó; José Luis; Jose, por Él y Luis, ya que su mamá, se llamaba Luisa y qué decir de Sergio y Horacio. -inolvidables los tres. -quienes en forma inesperada los tres fueron llamado al cielo, por más alegatos que el “viejo” hizo a su favor. Estos no prosperaron el creador lo requería allá, en sus aposentos, en sus habitaciones, en sus pastizales, todo ello por obra y gracia de san José, el patrón de don José y doña María.
Sergio, falleció un 18 de marzo de hace dos años, un día antes de la gloriosa fecha, cuando la Iglesia de Pedro, envuelve sus templos recordando a quien acompañó a Jesús, desde sus días de infancia, cuál fue acosado y amenazado, prácticamente desde su nacimiento. Horacio, aun se escuchan sus pasos de oficial del glorioso Colegio Civil, en cuanto Jose Luis, ya tiene tiempos sin tiempo de haberse ido.
EN PAZ DESCANSE DON JOSÉ; DOÑA MARÍA, SERGIO, JOSE LUIS Y HORACIO, DONDE SUS CARACTERÍSTICAS DE DISTINCIÓN, SON SU ALTO PROFESIONALISMO Y HUMANISMO, TRADUCIDO EN UN DON DE GENTES INVALUABLE Y EJEMPLAR.
POCAS VECES EMERGE UNA LAGRIMA; COMO AHORA, CUANDO SE SIENTE EL SENTIR DEL SENTIMIENTO DE LOS «AUSENTES». BENDITO DIOS.
